Meghan Markle y el príncipe Harry esperan con ansias la cena familiar de Acción de Gracias este año. Una fuente cercana a la pareja señaló: «Meghan y Harry van a tener una cena tranquila en casa y están ansiosos por celebrar su primer Día de Acción de Gracias en Estados Unidos en familia. Planean disfrutar de una comida casera con platos tradicionales de Acción de Gracias, incluidas recetas elaboradas con verduras frescas de su huerto», señaló la fuente.
La pareja y su hijo Archie estarán acompañados por la madre de Meghan, Doria Ragland, para sus festividades en casa. Ha sido una semana emotiva para la familia, luego de que Meghan Markle hiciera pública su reciente un aborto espontáneo en un artículo de opinión publicado en New York Times. En su «dolor insoportable» por la pérdida del segundo hijo, la duquesa de Sussex compartió que encontró una nueva comprensión sobre la importancia acercarse a los demás.
«La pérdida y el dolor nos han afectado a todos en 2020, en momentos tensos y debilitantes», dijo la duquesa, escribiendo en referencia a la pandemia de COVID-19, el movimiento Black Lives Matter y su propia devastación personal. «Los momentos tristes, aterradores o sacrosantos se viven todos solos… No hay nadie que se detenga a preguntar ‘¿Estás bien?'», expresó.
Un mensaje de aliento
A medida que se acercaba el Día de Acción de Gracias de este año, en un momento en el que «muchos de nosotros nos sentimos distanciados de nuestros seres queridos, solos, enfermos, asustados, divididos y tal vez luchando por encontrar algo que de sentido, cualquier cosa, por lo que estar agradecidos», señaló. Meghan animó a los lectores a simplemente preguntar a seres queridos: «¿Estás bien?»
«Por mucho que estemos en desacuerdo, por distanciados físicamente que estemos, la verdad es que estamos más conectados que nunca debido a todo lo que hemos soportado individual y colectivamente este año», escribió. «Nos estamos adaptando a una nueva normalidad en la que las caras están ocultas por máscaras, pero nos obliga a mirarnos a los ojos, a veces llenos de calidez, otras de lágrimas. Por primera vez, en mucho tiempo, como seres humanos, realmente nos estamos viendo», agregó.
