Debido al fallecimiento de Sergio Denis, los programas de espectáculos realizaron el correspondiente homenaje a una figura más que importante de la música Argentina. Pero dentro de lo que fueron las palabras de algunos conductores y panelistas de algunos ciclos, Jorge Rial se resaltó con las expresiones que manifestó con respecto a su vida y lo que es el recuerdo que una persona puede dejar a su familia por ser famoso.
De esta manera fue como Jorge introdujo al tema anteriormente dicho. «Los artistas tienen una gran ventaja por encima de cualquier mortal: son eternos a través de sus obras. Sergio no va a morir nunca porque siempre va a sonar una canción de él en algún lado. Sus hijos le pueden contar a los nietos de Sergio y los nietos a sus nietos quién era Sergio. Hoy por suerte está YouTube, que está todo», expresó.
Luego, Jorge Rial se refirió explícitamente a su caso familiar. «Sergio murió físicamente, pero incluidos nosotros tenemos esa suerte, porque yo digo, personalmente, estoy buscando la voz de mi viejo hace años y no la encuentro. Y no tengo dónde donde buscarla. Mi nieto (Francesco), mis hijas (Morena y Rocío), van a tener dónde buscar la mía, y mi imagen, mi voz, todo. Esto es algo a favor. Todos los días en algún lugar va a sonar la canción de Sergio y eso lo va a mantener vivo», aseveró.
La decisión de Jorge Rial para con las redes sociales
Cuando analizó los fuertes comentarios que recibió Luisana Lopilato en las redes sociales, Rial se encargó de comentar la elección de vida que realizó referido a los comentarios que recibe habitualmente en sus cuentas de Twitter e Instagram. «En las redes hay más amor que odio, pero uno se queda en la puteada, por eso siempre recomiendo esto, que yo lo vengo haciendo hace años, que es no leer los comentarios. Yo escribo, leeme, después decí lo que quieras», indicó.
Posteriormente, Jorge Rial manifestó lo que le sirvió en su vida no darle entidad a los comentarios de los denominados «haters» en las redes. «Yo no leo porque si no te quedás enganchado con una puteada y no con los otros diez que te dice ‘qué bueno, qué bueno’… Hay mucha gente de mie…. Bardear es fácil, no tiene ninguna construcción, ni emotiva, ni literaria, el tema es después sostenerlo», resaltó.
