Christophe Krywonis fue uno de los invitados al programa de Andy Kusnetzoff de este último sábado por un motivo claro: la final de Bake Off. El jurado, quien comenzó a circular en los medios al desempeñar el mismo papel en Masterchef, habló en «PH: podemos hablar» sobre las sensaciones que les dejó la polémica final. Además, reflexionó sobre la decisión que tomó en conjunto con la producción del reality gastronómico del que habló todo el país.
Se cumple una semana de la definición del certamen que enfrentó a Samanta Casais y a Damián Pier Basile. El jurado vio como ganadora a Samanta pero el «escritorio» le quitó el título de la mejor pastelera amateur del país. Sucede que mientras el show aún se emitía, se viralizaron imágenes de la concursante trabajando en restaurantes y hasta presentando sus recetas en programas de televisión.
Este hecho, no contemplado por la participante en el formulario de inscripción, atentó contra el espíritu del programa. Por lo cual, en una decisión que dividió aguas, el gran premio fue arrebatado de las manos de Samanta y fue entregado a Damián. Pícaro, Andy puso a quien fuera campeona en primera instancia, frente a frente con Christophe Krywonis y ambos compartieron una charla con mucha altura.
Luego, Andy decidió llevar las cosas a un nuevo nivel. Entonces le consultó al francés a quién de los dos protagonistas de la controvertida final contrataría en su restaurante. “Damián está en Rosario”, se apuró a decir Christophe, tratando de salir airoso de la situación en la que lo puso el conductor. “A Samanta sin problema si es que aprendió más cosas, porque le falta pulir muchas cosas todavía”, reflexionó.
En otro momento del programa, el jurado recordó un doloroso momento que le tocó vivir en su infancia. En una excursión escolar a la que no fue, dos de sus amigos murieron en Francia al pisar minas abandonadas desde la Segunda Guerra Mundial en Normandía. Krywonis se mostró como un fiel creyente. Él cree que su abuela fue quien le dijo que no vaya al colegio aquel día que marcó su vida por la tragedia vivida por sus compañeros.
