Meses atrás, precisamente el 22 de noviembre del año pasado, Carolina Pampita Ardohain y el empresario Roberto García Moritán celebraron su boda. El evento tuvo lugar en el Palacio Sans Souci, en Victoria, precisamente en el partido de San Fernando, donde acudieron doscientos invitados a la cena y cincuenta más después de las doce de la noche, en la que fue una fiesta inolvidable para propios y extraños. El hombre en cuestión charló con «Gente» y se refirió a los primeros momentos en que conoció a su esposa.
El empresario gastronómico rememoró el momento en que se la supo cruzar, charlar por primera vez pero que lo condujo luego a intentar seguir este vínculo pero de manera habitual en cuanto al diálogo. “Yo estaba yendo a Rosario y se me cruzó Pampita en mis pensamientos. Le conté lo que me había pasado a mi socio, Marcos, y él me dijo que la llamara. Yo busqué un intermediario, que es una amiga en común, y cuando hablé con ella me dijo: ‘Bueno, dejame chequear’, y al rato: ‘Sos un candidato’», expresó.
Luego, Roberto García Moritán amplió lo que le dijo su colega en cuanto a lo que debía hacer con Pampita. “De hecho, me tiró: ‘Pero llamala mañana mismo, invitala a salir’. A lo que yo le contesté: ‘No, Ori, mañana me estoy yendo a Perú’. A lo que me respondió `Nooo, no puede ser, ¿para qué me decís?´. El tema es que yo me iba a Perú y ella después se iba a Ibiza, por lo cual por un mes desde ese momento hasta que volviera no nos íbamos a poder ver», indicó.
Los inicios de la relación Pampita-Roberto García Moritán
Ante la imposibilidad de verse en persona, la tecnología dijo presente para sostener el fuego entre ambos. “Arrancamos escribiéndonos y a los tres/cuatro días pasamos a hablar por teléfono unas tres o cuatro horas todas las noches, y al final ya era con cámara, por FaceTime. Pero ese encontrarnos desde un lugar totalmente diferente estuvo bueno, porque conectamos desde otro lugar que no tiene nada que ver ni con la piel ni con el aspecto”, sostuvo el dueño de dos cadenas de comidas.
Por último, Roberto García Moritán resaltó lo que fueron las primeras charlas que tuvo con Pampita para después apuntar a futuro, donde tras el noviazgo dieron el «sí» desde el altar. “Eso nos permitió entender y medirnos desde un lugar mucho más maduro y racional. Y la realidad es que nos dimos cuenta de qué teníamos muchos proyectos en común, de que éramos muy parecidos y eso hizo que se acortaran mucho los caminos», concluyó.