Dentro de lo que fue su extensa entrevista por videollamada con «Intrusos en el espectáculo», Catherine Fulop no solamente se encargó de hablar respecto a la salud de su hija, Oriana Sabatini, y su yerno Paulo Dybala debido a que ambos contrajeron Coronavirus hace 10 días. El polémico video que la conductora protagonizó mostrando a su empleada trabajar en su casa en plena cuarentena obligatoria generó una ola de críticas que debió aclarar hoy.
Esto fue lo que mencionó la venezolana respecto a dicha filmación. «Justo pasó en el momento en el que me enteraba la noticia de Oriana y eso pasó a un segundísimo plano. Juana es muy buena cocinera y nosotras tenemos una relación en la que nos echamos bromas. Tenemos una relación súper linda y yo siempre pensé que mostrándola a Juana tal vez le sale algún trabajo…», narró.
Luego, la comunicadora elogió a quien es su empleada doméstica. «Las redes son tan importantes y a mí me gustaría que a Juanita le pase algo bueno, que pueda tener su localcito, vender comida, un emprendimiento con el que ella pueda independizarse. La gente cuando critica esas cosas a mí ya no me dan ganas de hacerlo. A mí no me perjudica, yo si no aparezco en las redes no me importa, con mi vida profesional estoy súper agradecida. En realidad, la perjudican a ella», comentó.
La preocupación de Ova Sabatini por su hija Oriana
Dentro de la entrevista, el que se sumó fue Ova Sabatini, esposo de Catherine Fulop, quien justamente hizo hincapié en lo que atraviesa Oriana en Italia. «Yo sigo preocupado todavía, por más que ahora me digan que el nuevo test le dio negativo y que tiene que hacerse otro test. Hay tanta información cruzada de todo esto que uno no tiene la seguridad de nada. No sé si se lo puede volver a contagiar o si puede empeorar la situación. La incertidumbre me mata», indicó.
Posteriormente, el hermano de la mejor tenista de la historia argentina, Gabriela, dejó en claro qué le gustaría hacer si pudiera salir de su hogar. «Lo que yo haría es tomarme un avión, irme para allá (Italia), abrazarla y agarrarme le virus junto con ella, para quedarme con ella. Eso es lo que me daría la tranquilidad que necesito, pero no lo puedo hacer. No me queda otra que aguantar y hablar mucho con ella. Debe estar harta de que le pregunte cómo está, si tiene síntomas, y cómo está Paulo», sentenció.
