Miguel Ángel Rodríguez y Lula Rosenthal llegaron a la pista del Cantando 2020 con la energía habitual para la gala de cumbia. Sin embargo, no tuvieron la recepción esperada por el jurado ni por los conductores. Es mas, la llegada del comediante a la escena puso bastante incómoda a Laurita Fernández, que tras una fuerte pregunta sobre su intimidad, no pudo evitar sentirse totalmente descolocada en vivo y en directo.
«¡Estás divina, mi amor! ¿Cómo está, Nico?», preguntó Rodríguez en clara referencia a Nicolás Cabré. El actor trabajó en varias ficciones junto al intérprete y le guarda un gran cariño. De esta manera, el capocómico puso en aprietos a la joven conductora.»Muy bien, muy bien está Nicolás», atinó a contestar la animadora que aún no sabe cómo manejar estas cuestiones a la hora de ponerse en frente de la conducción de un show.
Luego de escuchar su versión de «Una cerveza», de Ráfaga, fue Nacha Guevara quien comenzó una ronda de flojas devoluciones para la pareja. «Lula, arrasaste. Lo que has disfrutado y lo que te has divertido, me encantó. Miguel, hoy no jugaste como siempre. Vos sos muy juguetón y eso es encantador, pero hoy no te divertiste. Vos sos más loco. Me hubiera gustado verte mucho más exultante. Pero ella me encantó», expresó la dueña del voto secreto en esta ronda.
«Me gustó menos que la vez pasada, pero estuvo bien. Me fijé en la energía, pero estuvo muy exigido. Fusionaron cositas, esta vez con un tema mío, y es muy difícil hacer eso. Hermoso, me gustó», sumó Karina La Princesita y les puso un 7. Por su parte, Pepito Cibrián colocó un 6 y aseguró: «La vez anterior me parecieron geniales, pero esta vez no. Miguel estaba ‘caidongo’; con ese traje parece una lámpara colgante. Lula canta como los dioses, pero no sé si le faltó ensayo…».
Por último, Moria Casán soltó su lengua karateca antes de darle un 5 a Miguel Ángel Rodríguez, que con 18 puntos, quedó más cerca de la sentencia que de la cuarta ronda. «No me gustó. La ropa, si bien tiene que ver con la banda, no tiene nada que ver. Es como si a los Loco Mía los hubiesen tirado en Florencio Varela, en una bailanta. Das como papá separado con esos anteojos, ya entraste en actitud de tenedor libre, como José Marrone. Eso dejalo de lado un poco. Estás siendo demasiado generoso con tu compañera. Para compensar a ella venís como el tío borracho de la fiesta. Te quiero, pero no me gustó», disparó La One.
