El joven youtuber Yao Cabrera de 23 años fue denunciado por la dueña del inmueble donde se encuentra viviendo. La dueña de la vivienda acusa a Cabrera y al resto de los youtubers que forman parte de su equipo de estar usurpando la casa. Según los dichos de la mujer, el contrato de alquiler se venció en julio de este año pero se les fue haciendo extensiones a causa de la pandemia. Lo cierto es que no pagan alquiler desde el 1 de noviembre.
Como si no fuera poco, también deben más de 1 millón de pesos en concepto de expensas por las multas que les labran, ya que hace poco realizaron destrozos en la casa a causa de varias fiestas clandestinas organizadas por «WIFI«. En los últimos días fueron noticia cuando, mientras el equipo de Crónica TV informaba desde el lugar de los hechos, el periodista y el camarógrafo fueron agredidos por los influencers.
Mientras tanto, pasó otro hecho insólito. El uruguayo fingió nuevamente su muerte, pero no sólo eso, sino que hasta simuló ser secuestrado y asesinado por sicarios. Además realizó una campaña para recaudar 30 mil dólares. La siniestra simulación alcanzó niveles inesperados: hizo que sus seguidores de redes sociales asistan al Obelisco para llorar su muerte junto con pancartas y banderas.
No obstante, luego finalmente se conoció la verdad. Pese a que su nombre fue tendencia y la mentira parecía muy creíble, horas más tarde se desmintió la versión de su asesinato y además se filtraron imágenes que demostraban el acting que había realizado. Sin ir más lejos, no es la primera vez que Cabrera está involucrado con la Justicia, ya que tiene varias denuncias en su haber.
Sin embargo hace pocas horas sucedió lo inevitable. Tras fingir su fallecimiento en reiteradas ocasiones y con las múltiples denuncias en su contra, la policía se hizo presente en el domicilio de los involucrados y realizó un allanamiento en el lugar. Entre el prontuario de denuncias en su contra también figuran: estafa, venta de tarjetas para pagar cirugías inexistentes, confección de sistemas piramidales, abuso e incluso trata de personas.
